Fiestas del elefante blanco

En Norteamérica la costumbre de jugar al amigo invisible se conoce como «White Elephant Gift Exchange» (intercambio de regalos del elefante blanco). Este abultado nombre hace referencia a una variación del amigo invisible que conocemos. Una fiesta del elefante blanco es casi igual que el amigo invisible clásico o que el enemigo invisible, pero en Norteamérica los regalos a intercambiar no tienen un destinatario concreto. Así no hay problema de que alguien se sienta ofendido porque crea que su regalo es peor que los de los demás.
El nombre del juego proviene de la esfera indoasiática. Allí a los soberanos les gustaba regalarles a las familias ricas un elefante blanco (que es muy poco usual) con el fin de arruinarlas. Evidentemente, quien recibía un elefante blanco se veía obligado a ocuparse del animal. Su cuidado y alimentación tenía un coste elevadísimo ya en aquella época, de forma que estas familias iban poco a poco sacrificando toda su fortuna para poder pagar la manutención del elefante blanco. Pero, naturalmente, rehusar un regalo así se consideraba una gran ofensa que podía traer consecuencias terribles.
En base a este principio es muy habitual aprovechar el juego del elefante blanco para quitarse de encima cosas que nos han regalado y no queremos. Es comparable al enemigo invisible, solo que en Norteamérica no se regalan cachivaches, sino regalos que en su momento fueron un chasco o cosas que uno se compró en algún momento, pero que jamás ha usado.
Existen también otras modalidades en las que se regalan cositas graciosas. A menudo se establece antes algún tema, lo cual facilita bastante la elección de los regalos.
Esta modalidad de amigo invisible se conoce también en Norteamérica como «Yankee Swap», o intercambio yanqui. Allí las fiestas del elefante blanco no se celebran solo en navidad, sino que de vez en cuando dan pie a tardes muy entretenidas en cualquier momento del año.